Santander Cycle Chic

Santander Cycle Chic

miércoles, 23 de noviembre de 2011

aceras y bicicletas


Hay una creencia muy arraigada entre los que invaden las aceras montados en sus bicis, de que la carretera es igual a muerte o accidente grave seguro. No les falta razón. De hecho, la inmensa mayoría de los atropellos graves de ciclistas se producen precisamente cuando estos acceden desde una plataforma peatonal a la calzada, bien sea circulando por aceras, bien sea circulando por carriles bici segregados del resto del tráfico.

Sin embargo esta creencia, por más que pueda ser mayoritaria, no responde a ningún hecho o estadística evidenciable, sino, más bien, a un interés en la autojustificación de su actitud de manera generalizada, lo cual, defendido repetidamente hasta la saciedad, parece más cierto, más incuestionable y hasta más legítimo, cuando no más legal… pero a todo se llegará.
El hecho es que la mayoría, la inmensa mayoría de los conductores de automóviles no salen a la calle a ver si cazan algún ciclista o algún peatón infortunado por puro deporte o por afán ajusticiador. Siempre hay excepciones, pero todavía no he tenido noticias de nadie (miento, está aquél “kamikafre” que dió la vuelta al mundo por arremeter contra una masa crítica en Porto Alegre) que se dedique a atropellar ciclistas. Ni siquiera los energúmenos con los que te puedes topar en hora punta tienen intenciones de acabar con tu vida, como mucho hacen amagos de violencia o de lo que ellos creen que es poderío al volante.

Si revisamos los últimos atropellos graves o mortales acaecidos en nuestro país en entorno urbano, ninguno se produce por alcance, es decir, por detrás. Todos son colisiones laterales o atrapamientos porque las víctimas no son visibles o no circulan haciéndose ver y ocupando un espacio suficiente en la calzada. Así de simple. Luego está la mala suerte, pero esa no se puede evitar.

Ocupa la calzada
Así pues, basta en la práctica totalidad de los casos con ocupar un espacio suficiente en la calzada, con respeto, con dignidad y con seguridad, sin insolencia pero haciéndose valer para forzar los adelantamientos por otro carril. Basta con separarse al menos un metro de los bordillos y de los coches aparcados, no adelantar por la derecha si no tenemos absoluta certeza de que no corremos peligro, posicionarnos delante o detrás de los coches en los semáforos y stops, mantener una línea, señalizar nuestras maniobras, mantener una distancia de seguridad y circular a una velocidad adecuada.

bicicletas, ciudades, viajes

lunes, 21 de noviembre de 2011

cuando tu actitud toma un giro


Cuando tu actitud toma un giro, el cambio viene precedido por detalles suficientes que implican un distanciamiento gradual de todo aquello que no aporta a tu vida calidad de contenido. Cada día valoro más rodearme de gente positiva, alegre y sencilla. Las tiranteces son malísimas. Así que me estoy haciendo maestro en aliviar tensiones de quienes realmente lo merecen. Hay que saber dejar de lado lo que por desagradecido puede incluso resultar aburrido, vacío, insulso, desaborido...

david valverde

domingo, 6 de noviembre de 2011

…la primera vez…


Todos recordamos la primera vez que subimos a una bici y conseguimos dominar el equilibrio. Aquella pequeña bicicleta que seguramente heredamos de algún hermano mayor, de algún primo, de algún vecino a la que un día quitaron los ruedines, que nos daban seguridad y nos mantenían derechos y seguros sobre el suelo. Alguien iba a nuestro lado sujetándonos, dándonos ánimos y órdenes… “vete derecho… mira hacia el frente…”. De repente, sin saber muy bien cómo, nosotros solos estábamos pedaleando sin ayuda, derechos, en equilibrio, hacia adelante, cada vez más seguros y más sueltos. Ese momento inolvidable en el que todos nos hemos sentido dueños de la máquina, libres, fuertes, mágicos…
Pero tampoco se nos olvidará aquel día que tomamos la decisión de coger nuestra bici para desplazarnos por la ciudad. En medio de los coches y del tráfico, por el carril bici o por la calzada, evitando las vías rápidas y peligrosas y buscando itinerarios más seguros. La primera vez que, respirando hondo, sacamos la bici aquella que dormía desde hacía mucho tiempo en el garaje o en el trastero y decidimos que, a partir de entonces, merecería la pena vivir nuestros desplazamientos de otra manera, siendo nosotros mismos los protagonistas de nuestra movilidad cotidiana, al ritmo y a la velocidad que nos lleven nuestras piernas.
La primera vez nunca se olvida…

morgana

martes, 1 de noviembre de 2011

LA CHICA CHIC DEL MES - octubre 2011

un dia para VIVIR


Cuando los días apuñalan el calendario, cuando el Monte del Calvario se hace un hueco en tu jardín, abre la puerta de par en par y que corra el aire…
No es verdad que se ha hecho tarde, ahora toca ser feliz…
Esas cosas que hacen que la vida valga la pena deja que entren sin llamar a tu corazón….Cuando te siento no me importa lo que he llorado porque sé que en mi costado hay un sitio para ti…Dame ...tu mano no es verdad que se ha hecho tarde se acabó el ser cobarde ahora toca ser feliz…Cosas que hacen que la vida valga la pena como: Regar las rosas del ventanal y sembrar semillas de la pasión, volver a casa y saber que estás, para darle cuerda a mi corazón. Sentir la luz del amanecer colocando fotos por el salón. pasear en mi bicicleta. Decir te quiero en un papel y poner la mesa para dos, siempre para dos. Cosas que hacen que la vida valga la pena como... "las películas de amor", como... "las películas de amor".