Santander Cycle Chic
miércoles, 7 de abril de 2010
SALUD SOBRE RUEDAS
El Ayuntamiento de Santander ha organizado para este domingo una marcha en bicicleta y un juego de búsqueda del tesoro con motivo del Día Mundial de la Salud, que se conmemora hoy con el lema "Mil ciudades, mil vidas".
Las concejales de Salud, Carmen Martín, y Movilidad Sostenible, María José González Revuelta, han presentado hoy, en rueda de prensa, los actos programados por el Ayuntamiento de Santander, que empiezan esta tarde, a las 20.00 horas, con una mesa redonda en el Centro de Acción Social y Cultural de Caja Cantabria dedicada al urbanismo y la salud.
Participarán en esta actividad representantes de los colegios de médicos y arquitectos.
Los actos centrales de esta conmemoración tendrán lugar el domingo y consistirán en un paseo saludable por la ciudad, para el que el Ayuntamiento ha elegido el lema "Pedaleando por Santander, pedaleando por tu salud", y en un juego de búsqueda del tesoro conocido como Geocaching.
Los participantes en esta actividad deberán encontrar con la ayuda de un plano y un GPS varios tesoros escondidos en el Parque de Las Llamas, Mataleñas y el recinto de La Magdalena.
Carmen Martín ha explicado que este juego, que se celebrará por primera vez en Santander el domingo a partir de las 10.30 horas, se disputa en 210 países, con hasta 5.000 participantes al mismo tiempo.
Las personas que participen en la prueba del domingo podrán ir andando o en bicicleta.
Ese mismo día, a partir de las 9.30 horas, tendrá lugar un paseo en bicicleta por Santander.
El Ayuntamiento instalará en los Jardines de Pereda y en la Primera Playa de El Sardinero unas mesas informativas sobre los beneficios del uso de la bicicleta, en las que, además, se repartirá un desayuno saludable, compuesto por zumo y fruta.
González Revuelta ha destacado que el uso de la bicicleta tiene un beneficio individual, porque practicar ejercicio es bueno para la salud, pero también colectivo, ya que este medio de transporte es más eficaz y económico, favorece la sociabilidad y no contamina
martes, 6 de abril de 2010
EL ARTE DE ACERCAR Y ALEJAR
EL ARTE DE ACERCAR Y DE ALEJAR
No hay duda de que el ser-humano es un cuerpo entre los cuerpos. Su alma, si se quiere, está extendida en el espacio como algo existente. Es por esto, que nos desplazamos según las leyes físicas que rigen también a las cosas. Somos materia tanto como espíritu. Sin embargo, no somos simplemente cosas, pues nuestra relación con el tiempo, hace que seamos nosotros mismos como cuerpos auto-móviles, los que generemos y creemos el des-pliegue de las distancias. Para ponerlo de manera sencilla; nosotros hemos creado la “cercanía” y la “lejanía” de la realidad, puesto que ésta no es algo que valdría aplicar a la realidad de las cosas por sí mismas. Las cosas entre ellas no están ni cerca ni lejos, simplemente están. Lo que está cercano o lejano, cabe sólo para la realidad humana, puesto que ésta es una de sus relaciones ideales con el mundo. Acercarme o alejarme es lo que hago “yo” por medio de mi corporalidad. Así es cómo nos movernos, sabiendo que al acercarnos a una cosa alejamos también la otra, pues nuestra corporalidad es el centro de todas las distancias. Cada individuo es como un punto focal, que en su presencia al mundo, instaura lo cercano y lo lejano “desde” su cuerpo, desde su ego. Me alejo de mi habitación para acércame a mi trabajo; me alejo de mi trabajo para acercarme a mi habitación. ¿No hay aquí un circulo inalcanzable del andar humano? o ¿es acaso que “lo humano” es exactamente este andar inalcanzablemente circular? Más parece que a esto ultimo podríamos responder simplemente mirando hacia nuestro entorno. Alrededor nuestro, todo va y todo viene sin cesar. Los autos o las nubes vienen, pasan y se van. Por otra parte, las comunicaciones virtuales intentan hacernos más amable esta fugacidad de los cuerpos. Sin embargo, también ellas son presa de la cercanía y la lejanía, incluso, se nutren de ellas cuando intentar hacerla des-aparecer o aparecer según sea el caso y la demanda. ¿Al contestar mi celular no estoy acaso acercando a esa persona a la que contesto? No obstante, ¿no estoy acaso nuevamente alejándola al colgar? La verdad es que sí, y es así como ha ser nuestro mundo para siempre, pues como he dicho anteriormente, somos nosotros mismos como puntos focales los que des-plegamos las distancias de todas las cosas desde nuestro cuerpo. ¿Cómo superar lo distante y lo cercano? ¿cómo trascenderlo o eliminarlo? Afortunadamente, no hay que hacerlo ni querer hacerlo. Las distancias, como diría Aristóteles, nos indican como seres de auto-movimiento. No somos cosas, sino cuerpos concientes, auto-móviles. Entonces, ¿qué mejor que ser uno de esos que despliega las distancias, es decir, ser aquello que las hace nacer y morir? Podemos de todas formas, encontrar interesantes y amenas maneras de lidiar con esta condición tan íntimamente nuestra. En ese rumbo, por ejemplo, el hombre invento la bicicleta. La invento por lo demás, perteneciendo plenamente a la esencia que hemos descrito, esto es; ser el ente que crea las distancias. La bicicleta es sin duda el primero y el mejor de estos intentos de pertenecer fielmente a lo humano ¿Por qué? Bueno, primeramente, porque ahí está todavía. No se ha extinguido como se extingue lo inútil de este mundo, lo que no ayuda. La bicicleta es la forma directa de re-encontrarse con nuestra condición de vida. La bicicleta es lúdica, es decir, hace al hombre participar y asumir que es él y sus deseos, aquello que crea la necesidad de ir o venir hacia un lado o hacia el otro. Con la bicicleta se rompe la inercia, pues uno ya no es el asistente pasivo a las cercanías o las lejanías, sino el que propiamente, como “motor de la naturaleza” las asiste en su nacer y perecer constante. Además, la bicicleta es manejada plenamente por uno, y es uno el que decide paso a paso, si las cosas han de alejarse o acercarse rápida o lentamente. La bicicleta te habla, te deja expresar tú propia forma de ser entre las cosas. La bicicleta sólo asiste al hombre, no le impone gratuidades ni regalías digitales a su condición verdaderamente existencial. La bicicleta es casi como una forma de deslizarse por el mundo, de no rozarlo, de separar los pies de la tierra. Con la bicicleta nos apropiamos de nuestra intimidad, nos apropiamos en el fondo, de nuestro ser, de lo que somos para siempre (el ente que crea las distancias). Por esto, la bicicleta es una dignidad del hombre orgánico y corpóreo (no virtual). La bicicleta es, el arte eterno de acercarnos y alejarnos hacia el mundo.
lunes, 5 de abril de 2010
¿PODEMOS AMAR LOS OBJETOS?
Dentro del lenguaje creado por los humanos existen conceptos difíciles de acotar por lo abstractos y amplios que pueden ser. ¿Qué es la amistad?,¿qué es el compromiso?,¿qué es la justicia? Para cada uno de nosotros estos términos tienen una amplitud,una vibración y un significado distinto,más allá de que seguramente llegaríamos a acuerdos.
Probablemente el concepto "amar" pueda ser de los más escurridizos ya que en él se escoden otros muchos. Parece ser que,en pricipio,el amor es amor al prójimo. "Ama a prójimo como a ti mismo"- dijo Jesucristo. Un cocepto humano aplicable a otros humanos. El paso del tiempo y la "civilización" nos a ampliado el espectro y fuimos capaces de amar a los animales e incluso a cualquier ser vivo(animal o vegetal) aunque seguramente todos estaríamos de acuerdo en que es más fácil amar a un perro que a un saltamontes y a un saltamontes más que a una col de Bruselas(o de donde sea la col). Pero vayamos un poco más allá. ¿Podemos amar los objetos, amar las cosas inanimadas,aquello que requiere de nuestra voluntad para otorgarles una cierta "vida"?, ¿podemos amar una piedra,unas gafas o la batería del coche?
Me temo que a los objetos podemos amarlos tan sólo en función del placer que nos causan. Conozco gente que ama la cocina y consecuentemente es capaz de amar la cazuela de barro que le proporcionará el placer de comer. También conozco gente que aman los pinceles con los que podrán pintar el cuadro que tienen en mente. Hay gente que ama los puzzles porque le abstraen de la realidad. Hay gente,yo mismo, que ama aquello intangible como la música por el puro placer sonoro. Hay gente que ama el vino y cuidan con esmero su bodega. Mucha gente ama el dinero.
Yo amo las bicicletas. Empecé a amarlas ya hace unos veinte años cuando volví de Amsterdam fascinado por la marabunta de ciclistas que recorrían su ciudad educadamente y en silencio. Más tarde conocí otras ciudades donde el ciclismo urbano es religión (Berlín o Parma). También conocí "locos" de las bicicletas que recorrieron Barcelona-Tokio pedaleando.
La bicicleta genera ciudades limpias,educadas,más silenciosas,más cultas. Creo que el nivel de evolución cultural de una ciudad es directamente proporcional al número de bicicletas que recorren sus calles.
Recorrer Valencia en bicicleta hace no tantos años se contemplaba como una extravagancia. Mil veces conductores de coches descerebrados me adelantaban rozándome mientras me gritaban: Induraiiiiiin!!!!
Parece que mi ciudad se va civilizando y,al menos,ya nadie te grita bobadas. Pero queda tanto por hacer.
Tengo tres bicicletas y siempre digo que tendría una para cada estado de ánimo. Hay bicis nerviosas,bicis apacibles, bicis para matarse y bicis de salón, bicis perezosas, bicis adolescentes, bicis deportistas, bicis imposibles, bicis peso pluma y bicis peso pesado.
De las mías cada una tiene una forma de ser. A una le llamo la madre porque fue con la que realmente nació mi amor por ellas y es una bici pausada. Otra es la viajera(en la foto) porque la pliegas y te la llevas a cualquier lado. Y la última es la flaca porque tan solo pesa 8,8 kilos y corre como el viento. Las amo por igual pero cada una me ofrece aquello que tiene y que las otras carecen.
¿Se puede amar los objetos? Por supuesto.¿Qué amas tú?
jordi pla
domingo, 4 de abril de 2010
QUE TIENE DE ESPECIAL SER CICLISTA URBANO
La pregunta surge a partir de un comentario en un gran post de Javier Arias en su blog Un Ciclista Urbano.
Javier (que recorre diariamente el Paseo de la Castellana de Madrid en bicicleta para ir a trabajar) aconseja, básicamente, “respetar las normas de tráfico”. Fácil, sencillo, elegante.
Para darle un poco más de profundidad especifica un poco: circular por el centro del carril, señalizar debidamente, no ir por las aceras, no ir por el carril-bus, no saltarse los semáforos.
En los comentarios Eulez pregunta:
Tu mismo… entonces ¿qué te diferencia de un coche? Nada, no? Entonces, ¿que tiene de especial ser ciclista urbano?, nada, no? Entonces?
La respuesta de Javier es impecable:
Si descontamos algunas normas “secundarias”, el aparcamiento, la matriculación, etc, etc, en todas las demás, sobre todo las que se refieren a como deben de circular los vehículos en la ciudad, nada diferencia a una bicicleta de un coche, nada tiene de especial ser un ciclista urbano. Y pienso que está bien que así sea.
Es una cosa curiosa esto de “sentirse especial”. Realmente, el que se desplaza en bicicleta está solucionando un problema que también tienen los que conducen vehículos motorizados: tener que desplazarse. El elegir un medio u otro depende de muchas cosas: distancia al destino (si vives a 30 km a lo mejor no te apetece coger la bici), tipo de trabajo (hay quien necesita un coche sí o sí), forma física, pereza…
El caso es que ir en bicicleta es una elección personal, que no nos hace mejores ni peores que los demás. Puede ser por gusto, por ecologismo, por poder ver el cielo o disfrutar del trayecto de cada día. Pero el elegir la bicicleta no nos convierte en “especiales”. Sin embargo, sí nos da una serie de ventajas (forma física, disfrute, no tener que buscar aparcamiento, sufrir menos los atascos, no pagar combustible) y una serie de obligaciones: las del resto de conductores de vehículos.
Si eres capaz de ir todos los días a tu lugar de trabajo/estudio en un medio de transporte que te gusta y te hace sentir bien… ¿necesitas sentirte aún más especial? Si queremos que la bicicleta se convierta en una alternativa real al transporte motorizado ¿no deberíamos empezar a pensar en ella como algo completamente normal?
sábado, 3 de abril de 2010
FRASES BICICLETERAS
•“La vida es como la bicicleta, hay que pedalear hacia adelante para no perder el equilibrio”. Albert Einstein
•“Si tienes bici eres mi amigo” Gary Fisher
•“No se deja de pedalear cuando se envejece…. Se envejece cuando se deja de pedalear”. Anónimo
•“Y si no tienes bicicleta, recuerda que es posible vivir en bicicleta incluso sin bicicleta…”. Marcos Cruz
•“No soy un ciclista sólo en el sentido de que viajo en bicicleta, lo soy en el mismo sentido en que algunas personas son socialistas, fundamentalistas cristianos o realistas éticos; es decir el ciclismo es mi ideología, un sistema de creencia sobre la base de la pureza y la economía de movimiento y generosidad para con el ambiente… y quiero convertir a otros”. Robert Hanks
•“Cuando el espíritu está bajo, cuando el día aparece oscuro, cuando el trabajo se pone monótono, cuando la esperanza apenas está presente, sólo monte una bicicleta y salga a dar una vuelta por la carretera, todas sus preocupaciones desaparecerán”. S. Colmes
•“La bicicleta es la máquina más eficiente alguna vez creada: convirtiendo calorías en combustible, una bicicleta consigue el equivalente de tres mil millas por galón. Una persona pedaleando una bicicleta usa la energía más eficientemente que una gazela o un águila y las bicicletas con marco triangular pueden cargar unas 10 veces su propio peso, algo que ningún automóvil o avión pueden igualar”. Bill Strickland
•“Yo me relajo desarmando mi bicicleta y volviéndola a armar nuevamente”. Michele Pfeiffer
•“El ciclismo es un importante elemento del futuro. Algo no marcha bien en una sociedad que va en coche al gimnasio”. Bill Nye, científico y productor de programas televisivos sobre ciencia.
•“Para que el ciclismo urbano triunfe hace falta una revolución en la infraestructura de nuestra sociedad. Ahora mismo un ciclista urbano debe actuar como un guerrero vial, y la bicicleta tiene que ser barata y fea para que no la roben. Eso no es una cultura favorable a las bicicletas”. Gary Fisher, fundador de la empresa Fisher Bicycles
•“Nada es comparable al sencillo placer de montar en bicicleta”. John F. Kennedy
•“Yendo en bicicleta es como mejor se conocen los contornos de un país, pues uno suda ascendiendo a los montes y se desliza en las bajadas”. Ernest Hemingway
CARTA AL CONDUCTOR
AMIGO CONDUCTOR: Tu que vas detrás del volante, en un vehículo de mas de 500 kilos de peso, con un potente motor que responde de manera inmediata con tan solo ejercer algún tipo de fuerza sobre el acelerador.
Tú que aunque llueva estas protegido del agua y del frio, que para ver mejor, solo tienes que mover una "palanquita" para que se activen los limpiadores, que en la noche solo giras una perilla y el mundo se ilumina a tu paso, que llevas el control sobre el volante de más de una vida en tus manos, te pregunto:
¿Por que si voy delante de ti, en muchas ocasiones no me respetas?
yo represento otro vehículo, “no motorizado” pero vehículo al fin y al cabo, sin importar sus dimensiones. estoy de acuerdo que a veces es necesario que bajes la velocidad si acaso estoy frente a tí y no puedes pasar, pero solo recuerda esto:
”Yo te llego a quitar un minuto de tu vida, pero tú me puedes quitar la vida en un segundo"
¿has pensado en eso?
Todos los días me puedes ver en las calles, en las carreteras, desplazándome en un vehículo que no pesa ni la octava parte del peso de tu coche. me desplazo así porque tal vez no tenga otro medio de transporte; porque salgo a hacer deporte, a mover el cuerpo; por que voy a mi trabajo, porque quiero ahorrar dinero, librarme del tráfico; porque no quiero contaminar, en fin, no importa cual sea el motivo de estar ahí rodando más lento que tú, lo que importa es que estoy ahí, circulando en las calles, luchando por un espacio. Tomando en cuenta que las ciudades, en su mayoría, están diseñadas para los coches, considero que me podrías regalar ese pedacito de calle cuando me veas, simplemente cambiando de carril, dándome seguridad, cuidándome,
¿Recuerdas que te dije que llevas más de una vida en tus manos?
Además, si lo vemos desde el punto de vista lógico y científico, te lo pongo de la siguiente manera: Si tienes que bajar la velocidad, significa que tu llegaste a mi, por lo tanto yo estaba ahí primero. La física nos dice que, dos cuerpos no pueden ocupar el mismo espacio al mismo tiempo.
Por favor no intentes lo contrario.
Amigo, ponte en mi lugar, date cuenta del esfuerzo físico que yo tengo que hacer para huir de ti, para no sentir que me arrollas, para no sentirme culpable porque te hago bajar la velocidad, para ... … que importa, Tú solo aceleras moviendo un pie. Yo soy la carrocería de mi vehículo, lo cual no es difícil de entender. Uso casco, guantes, chamarras que brillan, luces, cintas reflejantes en mi ropa, todo esto buscando dos objetivos: 1.- protegerme, buscando mi seguridad. 2.- llamar tu atención, buscar que me veas ¿me ves? dime que el gastar el dinero en luces, pilas, cintas reflejantes, …. para ser visto por ti sirve de algo si yo uso cintas reflejantes en la noche, ¿podrías dar la luz para que se refleje? podrías prender tus luces por favor. ahí estoy, ahí voy, compartiendo la calle con ustedes.
Amigo conductor, si luego de leer esta información cambias de opinión, considera de ahora en adelante hacer lo siguiente: - Compartir el camino simplemente cambiando de carril - Ceder el paso al ciclista - Proteger a aquellos que su única carrocería es su propio cuerpo - Prender las luces cuando tu visibilidad sea menor - Comprender que el esfuerzo de cada uno de nosotros merece respeto - Ser un conductor consiente
Y recuerda: ”yo te llego a quitar un minuto de tu vida, pero tú me puedes quitar la vida en un segundo" comparte el camino.
Atentamente: Tu amigo el ciclista.
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